Ana Carrau: "Ayudamos a personas a encontrar su forma de aportar en el mundo con herramientas para desarrollar su talento"

Con motivo de su participación en "Territorios conectados: generadores de oportunidades", entrevistamos a Ana Carrau, fundadora y CEO de Upbeat Modus. Con la empresa impulsa proyectos como The Impact Project, Chiquiemprendedores o Inspiradas. Además, es vicepresidenta de la Asociación de Jóvenes Empresarios y vocal del Círculo de Estudios sobre Innovación.

 

Cuéntanos Ana, ¿Cómo nace Upbeat Modus y en qué proyectos trabajáis actualmente?

El propósito de la empresa es mejorar el mundo a través del talento exponencial de las personas. Por eso, a través de varios proyectos dirigidos a públicos diferentes, les ayudamos a descubrir e impulsar su talento, y a conectarlo con la realidad en la que pueden intervenir ya y que necesita ese talento urgentemente.

 

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«Los más pequeños necesitan llegar a adultos con la certeza de sus habilidades. Todo lo demás, como el contexto o las oportunidades laborales, va a cambiar»

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Como formadora en emprendimiento, ¿cómo fomentáis el talento en edades tempranas?

Desde Chiquiemprendedores impulsamos diferentes habilidades personales que se recogen en lo que llamamos "espíritu emprendedor". Independientemente de que en un futuro vayan a generar proyectos propios o no, lo que es un hecho es que los más pequeños necesitan llegar a adultos con la certeza de sus habilidades. Todo lo demás, como el contexto, las oportunidades laborales o los retos a los que se enfrenten, va a cambiar.

En nuestras actividades les exponemos a retos reales donde se tienen que comportar como auténticos emprendedores, les hacemos experimentar diversas situaciones y roles para que descubran poco a poco las habilidades que tienen.

 

¿Qué herramientas existen para identificar el talento?

Actuar y analizar. La primera es hacer que las cosas sucedan, dejarnos guiar por nuestro instinto, salir de nuestra zona de confort, exponernos a nuevas situaciones y aprender sin descanso para descubrir la zona mágica donde se encuentran esos talentos que aún no hemos descubierto porque no los hemos necesitado antes.

La segunda se basa en el autoconocimiento. Trabajar en nuestra historia, analizar cómo reaccionamos a los retos que se ponen delante y buscar nuestro propósito son la clave para afrontar nuestro futuro.

 

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«El talento es la clave del desarrollo en cualquier proyecto empresarial. Sin personas que lo impulsen no hay proyecto, y estamos rodeados de talento local»

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¿Crees que la identificación y la retención del talento local es uno de los elementos fundamentales para generar nueva actividad económica sobre el territorio?

El talento es la clave del desarrollo en cualquier proyecto empresarial. Sin personas que lo impulsen no hay proyecto, y estamos rodeados de talento local. Nuestras universidades y centros de formación gradúan a miles de jóvenes muy válidos cada año pero que tienen un vacío existencial enorme. No saben hacia dónde ir porque no tienen claro lo que pueden aportar.

Ante el retador contexto que tenemos delante, nuestro foco, como empresas, debe estar en trabajar una cultura corporativa honesta y coherente, donde las personas se sientan integradas con el proyecto porque está alineado con su propósito vital. Como formadores, debemos poner el foco en ayudar a descubrir a estos jóvenes el valor que aportan y no solo centrarnos en sus competencias técnicas, que están destinadas a caducar en un mundo que cambia tan rápidamente.

 

¿Qué retos profesionales tienes a la vista?

Mi foco ahora está en The Impact Project, desde donde ayudamos a personas a encontrar su forma de aportar en el mundo, les damos herramientas para desarrollar su talento, conexiones para aplicarlo y motivación para tomar las riendas de su carrera profesional. Lo hacemos con procesos de mentoría individual y, en el caso de mujeres directivas, también a través del acompañamiento grupal.